Publicado el 1 de febrero de 2016 | Primera Hora
Por Istra Pacheco
Denuncian que la peligrosa sustancia, que puede causar la muerte a quien la usa, abunda en en esos lugares de tratamientos a los adictos.
A pesar de los esfuerzos del Gobierno por alejar las drogas de los centros de tratamiento ambulatorios y residenciales, la marihuana sintética, como un submarino indetectable, no encuentra muro que la detenga en las instalaciones de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (Assmca) en Río Piedras.
Según José Luis (nombre ficticio para proteger su identidad), un ex interno de la residencia para varones de Assmca en Río Piedras, tanta es la presencia de esta sustancia que es normal ver ambulancias llegar allí todo el tiempo a recoger a personas que sufren sus efectos.
Por su parte, el salubrista José Vargas Vidot, quien dirige Iniciativa Comunitaria y ha trabajado en los alrededores de la institución de Assmca en Río Piedras, indicó que cerca de 30% de los usuarios admite haber consumido la droga allí y en otros centros del Gobierno.
“Ciertamente puedo decir, y esto es de lo que se aprecia, de manera anecdotal… en cada ronda nocturna nuestra, tres veces a la semana podemos encontrar de cada ronda 60 a 70 usuarios y de esos unos 10 que hablan directamente que están usando marihuana sintética y también hablan de la afluencia de ella en los centros de metadona”, afirmó Vargas Vidot.
Directivos del hogar saben del problema
Una fuente de entero crédito confirmó a Primera Hora que la directora de la residencia de Río Piedras, Aida Iris Cruz Rodríguez, tuvo que ofrecer explicaciones ante un juez del Centro Judicial de Bayamón cuando trascendió la información sobre el uso de marihuana sintética en la institución.
Se indicó que la funcionaria tuvo que admitir en corte que la marihuana sintética tiene gran entrada en la residencia de Río Piedras y que está poniendo en riesgo muchas vidas. Además, mostró un análisis de una droga que se ocupó en las instalaciones, del cual este diario tiene copia, que demuestra que se trataba de marihuana sintética.
“A ellos en Assmca se les dijo en la corte que es de ellos la responsabilidad, como Estado, de investigar que no exista ese tipo de acceso para los residentes que reciben tratamiento”, dijo la fuente.
Sustancia que puede ser mortal
Los efectos de la marihuana sintética pueden incluso causar la muerte, a diferencia de la marihuana natural, indicó Vargas Vidot. Según literatura médica, entre los efectos más comunes de esta droga están los ataques del corazón, ataques de pánico, psicosis y aletargamiento o hiperactividad repentinos y extremos.
Según ha explicado Assmca, la marihuana sintética es una sustancia compuesta por hierbas, incienso u otros materiales de hoja “que son regados con productos químicos de laboratorio para imitar el efecto del ingrediente psicoactivo (que altera la mente) de la planta de marihuana”.
Vargas Vidot lamentó que desde el 2013 el Departamento de Salud y Assmca le hayan “cerrado las puertas” a su organización para trabajar directamente con los internos de sus residencias. Iniciativa Comunitaria, entre otros servicios, ayuda a los usuarios de drogas en su rehabilitación y desarrollo.
Al mismo tiempo, el salubrista aseguró que el alza en el uso de la droga sintética es una tendencia que debe monitorearse y pidió que no se cierre los ojos a esa realidad.
El problema es que dejar el vicio no es fácil y como esta droga sintética es indetectable en pruebas de dopaje y es tan accesible, se convierte en favorita de muchos adictos que están en programas de desintoxicación e ignorar sus consecuencias es muy peligroso, advirtió el salubrista.
Mientras, José Luis relató que “en los meses recientes hubo muchos casos en el residencial de muchachos (afectados) por (consumir marihuana) sintética. Lo que ellos hacen es que desfalcan el cigarrillo (le quitan lo de adentro) y le meten sintética adentro y así es como se la fuman”.
Como parte del intento de los directivos del residencial de varones de Assmca de controlar el ingreso de sustancias, comenzaron a racionar la entrega de cigarrillos, que es la forma más fácil de burlar la vigilancia. Desde la misma mañana que se estableció el control se incrementó el uso de la marihuana sintética en el lugar, según José Luis.
“Eso cambió todo… a los 15 minutos de que te dieran el cigarrillo ya había alguno en el piso (por haberlo fumado con marihuana sintética adentro)… al otro día hubo otro, al otro día otros dos, después otro que empezó a convulsionar como si fuera epiléptico… así ha habido un sinnúmero de caídas que cuando llaman a Centro Médico para (que envíen) la ambulancia dicen: ‘¿Otra vez?’”, relató.
Muerte sospechosa
Según José Luis, el caso de muerte sospechosa más reciente en el citado centro fue cerca del Día de Acción de Gracias cuando un interno, natural de un pueblo del este de la Isla, debía salir de pase durante el fin de semana para estar con su familia. La noche antes se podía escuchar claramente al joven mientras parecía que deliraba.
Al día siguiente al menos tres empleados de la residencia, incluyendo una enfermera, un oficial administrativo y el empleado de mantenimiento, vieron el comportamiento raro del joven, aseguró José Luis.
Horas después, cuando finalmente salió, alegadamente en un taxi, murió en su casa.
“Allí todos los asistentes saben lo que pasa y se hacen de la vista larga. ‘Armando’ estaba bien malo, ellos lo sabían y lo dejaron ir pa’ no tener que bregar con él y por eso se murió”, insistió José Luis.